1. Escribir con visión cinematográfica
Cuando pensamos en una película o un cortometraje, lo primero que nos viene a la mente suelen ser las imágenes: una escena impactante, un plano inolvidable, una interpretación magistral. Pero detrás de toda esa magia visual hay una arquitectura invisible y poderosa: el guion. Es el plano maestro, el esqueleto narrativo sobre el que se construye una obra audiovisual.
Escribir un guion no es simplemente contar una historia; es aprender a narrar a través de lo que se ve y se escucha, a organizar el contenido en una estructura que permita que los conflictos, las emociones y los giros dramáticos fluyan de manera eficaz.
Ya sea que estés trabajando en un largometraje o en un cortometraje, comprender la estructura es el primer paso para dominar el arte de contar historias para la pantalla. En esta guía, vamos a recorrer juntos los principios, técnicas y decisiones clave que todo guionista debe conocer. Y lo haremos con una premisa clara: la estructura no es una jaula, es una brújula.