31 marzo 2019

Lenguaje corporal en tus escritos - 2. Expresiones faciales

     Las expresiones faciales son una de las formas más visibles y contundentes de transmitir emociones. En la escritura de novelas y relatos, describir con precisión estas expresiones permite al lector conectar de manera más profunda con los personajes, entendiendo sus emociones incluso cuando las palabras no lo dicen todo. Cada pequeño movimiento en el rostro puede ser una pista valiosa sobre lo que está pensando o sintiendo un personaje, y aprovechar este recurso enriquecerá la narrativa de tus textos.



Las seis emociones básicas y sus expresiones


     Según estudios de psicología emocional, hay seis emociones universales que se reflejan claramente en el rostro. Estas son:

  • Sorpresa:
    • Cejas levantadas, curvas y elevadas.
    • Piel estirada debajo de las cejas, con arrugas horizontales en la frente.
    • Párpados abiertos, mostrando el blanco del ojo por encima del iris.
    • Mandíbula caída, labios y dientes separados sin tensión.
  • Miedo:
    • Cejas levantadas y contraídas al mismo tiempo, con arrugas centradas en la frente.
    • Párpado superior levantado, mostrando la esclerótica; párpado inferior tenso y alzado.
    • Boca abierta, labios tensos y contraídos hacia atrás.
  • Disgusto:
    • Labio superior levantado, nariz arrugada.
    • Mejillas levantadas, cejas bajas empujando hacia abajo el párpado superior.
    • Líneas debajo del párpado inferior.
  • Cólera:
    • Cejas bajas y contraídas, con líneas verticales entre ellas.
    • Párpado inferior tenso; mirada dura, labios apretados o tensos y abiertos en forma cuadrangular.
    • Pupilas dilatadas, reflejo de una intensa emoción.
  • Felicidad:
    • Comisuras de los labios hacia atrás y arriba; pueden mostrar dientes o no.
    • Mejillas levantadas, con arrugas debajo de los ojos.
    • Las conocidas “patas de gallo” se forman alrededor del ángulo externo del ojo.
  • Tristeza:
    • Ángulos interiores de los ojos hacia arriba, formando un triángulo con las cejas.
    • Párpado superior levantado en el ángulo interno del ojo.
    • Comisuras de los labios hacia abajo; los labios pueden temblar.


Expresiones faciales adicionales para enriquecer tus relatos


     A continuación, se presentan otras expresiones faciales que pueden aportar matices a los personajes:

  • Morderse el labio inferior: Ansiedad, nerviosismo o concentración intensa.
  • Fruncir ligeramente los labios: Desaprobación o duda.
  • Elevar solo una ceja: Escepticismo o sorpresa moderada.
  • Parpadear rápidamente: Incomodidad o intento de procesar información inesperada.
  • Inclinar los labios hacia un lado: Desconfianza o confusión.
  • Esbozar una sonrisa contenida: Sarcasmo o satisfacción oculta.
  • Cerrar los ojos lentamente: Exasperación o resignación.
  • Frotar las sienes con los dedos: Fatiga o estrés.
  • Guiñar un ojo: Complicidad o humor.


Cómo utilizar estas expresiones en tus escritos


     Describir expresiones faciales puede aportar profundidad a tus personajes y sus interacciones. Aquí algunos consejos:

  • Elige detalles significativos: No describas todas las expresiones de un personaje; selecciona las que sean más relevantes para la escena.
  • Conecta las expresiones con el contexto emocional: Usa el lenguaje corporal para reforzar el diálogo o crear contraste con lo que el personaje dice.
  • Evita redundancias: Si ya indicas que un personaje está triste, una descripción sutil del rostro puede ser más efectiva que reiterar la emoción directamente.



     Incorporar las expresiones faciales en la escritura te permitirá comunicar emociones de forma rica y visual, haciendo que tus personajes cobren vida en la mente del lector.



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30 marzo 2019

Soñar contigo

Con algunas he soñado antes
pero tú eres la única
con la que puedo
soñar despierto.

Haces que pueda ser yo,
haces que me sienta seguro
como nunca antes me había sentido,
y todo esto es gracias a ti.

Baje la guardia por ti y
Empecé a soñar contigo
Arriesgándome a caer, pero tu
Tejiste una red, con la que
Rescataste mi corazón.
Intente ponerme a flote pero a
Zozobrar empecé de nuevo.

28 marzo 2019

Yelena Mukhina - La niña triste de la gimnasia artística

Elena Mukhina es uno de los símbolos de la oscuridad que se vivía en relación al deporte más allá del Telón de Acero. Tiempos en los que el esfuerzo en busca del éxito se llevaba hasta extremos intolerables para el cuerpo humano. Esta gimnasta, extraordinaria, destinada a ser campeona olímpica en Moscú en 1980 sufrió una desgraciada lesión sobre la que los dirigentes de la URSS solo arrojaron confusión o silencio. Había sido capaz de destronar poco antes a Nadia Comaneci en el Mundial, pero allí acabó su gloria deportiva. Se han cumplido ya doce años de su muerte, el día 22 de diciembre de 2006.Elena Mukhina era una chica triste con una mirada triste. Pocos motivos tenía para sonreír. La vida le enseñó demasiado pronto su cara más amarga porque con años su padre las abandonó a ella y a su madre y cuando solo tenía cinco años perdió a su madre en un incendio. Pasó al cuidado de su abuela materna, siendo siempre una niña triste y muy seria, pocas veces se la veía sonreír. Elena encontró refugio en la gimnasia el día en que un entrenador acudió a su colegio en busca de niñas que quisiesen entrar a formar parte de la selección con la que contaba el CSKA de Moscú. Tenía solo doce años y de inmediato los técnicos advirtieron en aquella menuda muchacha, permanentemente seria, unas condiciones gigantescas. 
Mihajl Klimenko, que venía de la gimnasia masculina, se convirtió en su entrenador. Con él Mukhina descubrió las sesiones interminables, la exigencia por norma, no concederse ni un respiro y llevar el cuerpo muy por encima de los límites. Las autoridades deportivas de la URSS estaban inquietas a mediados de los setenta por la irrupción arrolladora de las gimnastas rumanas que se habían atrevido a discutir su tradicional reinado. En 1976, con dieciséis años, Mukhina gana con el campeonato nacional juvenil casi al mismo tiempo que Nadia Comaneci se impone en los Juegos Olímpicos de Montreal y genera una crisis interna en la gimnasia soviética que no acepta la derrota con facilidad. Las autoridades cargan contra la responsable del equipo, la legendaria Larisa Latynina, que dice aquello de "yo no tengo la culpa de que Comaneci haya nacido en Rumanía". Se suceden las reuniones y la petición de explicaciones. La consigna interna resulta muy clara: una cosa es perder en Montreal y otra bien diferente es hacerlo en 1980 en los Juegos de Moscú con lo que se intensifica el trabajo de cara a esa cita. Y en ese momento todo el mundo mira hacia Elena Mukhina; la única gimnasta en la que se advierte el potencial suficiente como para hacer frente a la diosa rumana. Por aquel entonces Klimenko, su entrenador, comienza a introducir elementos propios de la gimnasia masculina en los ejercicios de las mujeres. Respeta la tradición soviética de los movimientos basados en la expresión y el ballet, pero aparecen nuevos saltos y giros nunca vistos antes en la gimnasia femenina. Lo que no cambia es la disciplina y las más de ocho horas de entrenamiento diarias.
En 1977 comienzan a llegar los primeros frutos. En el Europeo Mukhina gana tres oros y pierde por escaso margen el concurso general ante Comaneci. Es un simple aviso de lo que sucedería al año siguiente en el Mundial de Estrasburgo. Es la hora de la explosión de la gimnasta moscovita que conquista cinco oros y se impone a la rumana. En Francia sorprende su inmensa seguridad y la mezcla de plasticidad y potencia que inundan sus ejercicios. Los analistas comenzaron a referirse a un nuevo tiempo en la gimnasia femenina representado por Elena Mukhina.

El problema es que Klimenko quería llevar demasiado lejos su plan. De cara a los Juegos de Moscú comenzó a incluir en el ejercicio de suelo de Mukhina el salto Thomas que solo realizaban los hombres y que resultaba extremadamente peligroso porque si no se alcanzaba la altura y velocidad necesarias se corría el riesgo de sufrir una seria lesión. Años después la propia Mukhina confesaría que en más de una ocasión, de forma tímida, había comentado a su técnico que no se sentía demasiado segura realizando ese salto y que la respuesta que le había dado era que "las gimnastas como tú no se rompen el cuello".

En 1979, su rumbo se complicó de forma inesperada, durante unos entrenamientos para el Mundial de Estados Unidos se rompió una pierna que la tuvo de baja unos meses, algo que no se podían permitir, su estrella no podía estar sin entrenar por lo que Klimenko y Aman Shaniyazov, que era el jefe de equipo de la URRS la presionaron para que volviera a los entrenamientos y llegó a reaparecer pero su pierna estaba torcida así que la tuvieron que operar. El calendario comenzaba a presionar a los dirigentes del deporte soviético y de la Federación de Gimnasia en particular. Aunque de un modo ligeramente mas prudente la presión sobre Mukhina se mantuvo. 



Reapareció unos meses antes de los Juegos, Klimenko aunque mantenía movimientos femeninos que venían del ballet como marca la tradición de la gimnasia artística rusa, decidió incluir otros saltos masculinos para hacer su coreografía mucho mas espectacular ya que Elena se había ganado su fama precisamente por la dificultad que entrañaban todos sus ejercicios y la perfección y soltura con la que los llevaba a cabo. Klimenko no cambió los planes sobre el salto Thomas pese a que el periodo de baja había mermado las condiciones de la moscovita. El técnico estaba convencido de que los Juegos de 1980 merecían un elemento como ese que cambiaría para siempre la historia de la gimnasia femenina y convertiría a Mukhina en una leyenda. Elena llegó a decirle a su entrenador que no se veía haciendo el salto, que la daba miedo y él le respondió que una persona como ella nunca se rompería el cuello haciendo ese salto.

Dos semanas antes de la cita, en una concentración en Minsk, llegó la tragedia. Mientras entrenaba el ejercicio de suelo, . Elena estaba agotada, los entrenamientos pasaban las 8 horas diarias con creces, arrastraba sus lesiones mal curadas lo que hacia que no estuviese al 100% y Klimenko la exigía mas y mas, por lo que una de las veces que hizo el salto Thomas, la gimnasta no logró la altura necesaria y se golpeó con violencia la cabeza contra el suelo, golpe que le provocó la rotura de varias vértebras.

La Federación Soviética se limitó a decir que una lesión apartaba a Mukhina de los Juegos Olímpicos mientras comenzaban a circular rumores sobre la verdadera causa de su ausencia. Se había quedado tetrapléjica tras romperse el cuello, una verdad que tardó meses en conocerse porque la URSS escondió a la deportista y consiguió construir a su alrededor una barrera que nadie era capaz de cruzar. Tuvo que pasar más de un año hasta que los medios publicaron el verdadero estado de la gimnasta, momento en que algunos de los dirigentes la acusaron directamente de querer realizar "ejercicios para los que no estaba preparada". Mukhina apenas dijo nada y solo en una entrevista para un documental admitía ser una víctima de un sistema enfermizo que solo contemplaba llegar al éxito en el deporte de la manera que fuese. Su abuela la cuidó hasta que el 22 de diciembre de 2006 murió como consecuencia de las complicaciones derivadas de su grave lesión. El salto Thomas fue prohibido para siempre en la gimnasia femenina.





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26 marzo 2019

Leyendas de EEUU - Leyenda de Alcantarillas llenas de cocodrilos



Durante un tiempo en EEUU se empezó la moda, tener como mascotas caimanes y cocodrilos, traídos desde Florida, se cuidaban desde recién nacidos en terrarios hasta que empezaban a alcanzar un tamaño considerable, en ese momento los animales perdían su “gracia” pues constituían, además de un peligro, un gasto económico elevado en comida. Ese era el momento de deshacerse de la “mascota” y que mejor manera que dejando en libertad al animal que había ganado el cariño de su dueño tras tanto tiempo a su cuidado .
La leyenda cuenta que el mejor sistema de liberar al animal era por el desagüe del inodoro. Reducidos grupos de estos caimanes conseguían sobrevivir en las alcantarillas alimentándose de ratas y desperdicios e incluso llegaron a reproducirse en las cloacas.
Tras varias generaciones los caimanes supervivientes mutaron y perdieron su visión, así como su pigmentación, convirtiéndose en seres ciegos y albinos que reinaban las profundidades de la ciudad. La leyenda llegaba más allá pues según relatos de terceras personas algunos indigentes que bajaban a las cloacas a refugiarse del frío e incluso algún operario municipal encargado del mantenimiento de las alcantarillas habían desaparecido supuestamente devorados por estos animales. No obstante, ninguna de las incontables búsquedas que se han realizado los ha encontrado.

¿Qué hay de cierto en en esta leyenda?

La leyenda se cae por su propio peso pues ningún caimán o cocodrilo podría sobrevivir a las bajas temperaturas del invierno de New York, además en caso de poder soportar las bajas temperaturas, la acción de los compuestos químicos nocivos que habitualmente se tiran por el desagüe y las bacterias que pueblan las alcantarillas les habrían causado enfermedades que habrían acabado con los reptiles.
Por otra parte recordemos que la leyenda se centra en ciudades como New York, de existir realmente esos animales mutantes se habría encontrado algún ejemplar y más teniendo en cuenta que según las descripciones los cocodrilos alcazaban tamaños considerables.
Aunque la leyenda es falsa si existen casos de suelta de cocodrilos y caimanes en zonas que no pertenecen a su hábitat natural, gente desaprensiva ha liberado en ocasiones animales en pantanos, presas y lagos, lo normal es que estos animales mueran al empezar las épocas invernales pues su entorno natural suele ser en zonas más tropicales. En España por ejemplo se han dado casos en los que se han encontrado en estanques cocodrilos de mediano tamaño así como pirañas y otros peces tropicales. Esto supone no sólo un grave peligro para las personas y mascotas si no también para la fauna autóctona que se encuentra con un depredador para el cual no tiene sistema de defensa.

Esta leyenda se popularizó con series animadas, películas y comics como Batman. En esta saga, hay un monstruo llamado Killer Croc que vive en las alcantarillas de Ciudad Gótica y se parece a un reptil.


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24 marzo 2019

Lenguaje corporal en tus escritos - 1. Gestos

     El lenguaje corporal es una de las formas más poderosas y universales de comunicación. Incluso cuando no decimos una palabra, nuestros cuerpos hablan por nosotros. En la escritura de novelas y relatos, aprovechar el lenguaje corporal para describir a los personajes puede dar profundidad, autenticidad y dinamismo a la narrativa. Los gestos, las posturas, las expresiones faciales y otros movimientos del cuerpo pueden transmitir emociones, intenciones y pensamientos de manera que las palabras por sí solas no pueden lograr.



La importancia del lenguaje corporal en los relatos


     En la literatura, el lenguaje corporal es una herramienta para mostrar, no solo contar. En lugar de escribir "estaba nervioso", un escritor puede describir cómo un personaje "jugaba con el dobladillo de su camisa" o "se mordía las uñas", haciendo que el lector deduzca por sí mismo las emociones del personaje. Este nivel de detalle conecta al lector con la historia y hace que los personajes sean más humanos y creíbles.



Cómo usar el lenguaje corporal en tus personajes



1. Gestos comunes


     Muchos gestos son universales, aunque el contexto y la cultura pueden cambiar su interpretación. En la escritura, los gestos básicos pueden servir para transmitir emociones de manera implícita:

  • Mover la cabeza para afirmar o negar: Indica claridad o convicción.
  • Fruncir el ceño: Muestra enfado, concentración o duda.
  • Encogerse de hombros: Suele indicar confusión, indiferencia o resignación.
  • Jugar con un objeto pequeño, como un bolígrafo: Sugiere nerviosismo o distracción.


2. Detalles reveladores


     Es importante recordar que los gestos se pueden fingir, pero los pequeños detalles delatan las verdaderas emociones. Incorporar estos detalles en tus descripciones puede enriquecer la narración:

  • Acariciarse la mandíbula: Toma de decisiones.
  • Entrelazar los dedos: Autoridad.
  • Dar un tirón al oído: Inseguridad.
  • Mirar hacia abajo: No creer en lo que se escucha.
  • Frotarse las manos: Impaciencia.
  • Apretarse la nariz: Evaluación negativa.
  • Golpear ligeramente los dedos sobre una superficie: Impaciencia o ansiedad.
  • Sentarse con las manos agarrando la cabeza por detrás: Seguridad en sí mismo y superioridad.
  • Inclinar la cabeza: Interés o curiosidad genuina.
  • Caminar erguido: Confianza y seguridad en sí mismo.
  • Pararse con las manos en las caderas: Buena disposición para hacer algo.
  • Jugar con el cabello: Falta de confianza en sí mismo e inseguridad.
  • Comerse las uñas: Inseguridad o nervios.
  • Cabeza descansando sobre las manos o mirada hacia el suelo: Aburrimiento.
  • Cruzar las piernas, balanceando ligeramente el pie: Aburrimiento.
  • Brazos cruzados a la altura del pecho: Actitud defensiva o rechazo.
  • Caminar con las manos en los bolsillos o con los hombros encorvados: Abatimiento o introspección.
  • Manos en las mejillas: Evaluación o reflexión.
  • Frotarse un ojo: Dudas o cansancio.
  • Tocarse ligeramente la nariz: Mentir, dudar o rechazar algo.


El impacto cultural y los gestos


     En la narrativa, es fundamental considerar el contexto cultural de los personajes. Un gesto que indica afirmación en una cultura podría significar rechazo en otra. Al escribir historias con personajes de diferentes orígenes, asegúrate de investigar cómo se interpretan los gestos en sus respectivas culturas. Esto no solo agrega autenticidad, sino que también enriquece la diversidad en tus relatos.



Consejos prácticos para escritores

  • Muestra las emociones a través de acciones: En lugar de describir emociones directamente, usa el lenguaje corporal de tus personajes para que los lectores sientan lo que ellos sienten.
  • Varía los gestos: Evita que tus personajes repitan los mismos gestos constantemente. Esto puede hacer que parezcan unidimensionales.
  • Crea contradicciones: A veces, el lenguaje corporal puede contradecir lo que un personaje dice. Por ejemplo, un personaje podría decir "Estoy bien" mientras aprieta sus puños con tensión, lo que sugiere lo contrario.
  • Utiliza los gestos como foreshadowing: Algunos gestos pueden insinuar emociones o acciones futuras. Por ejemplo, un personaje que constantemente tamborilea los dedos puede estar acumulando tensión antes de estallar.


Conclusión


     El lenguaje corporal es una herramienta imprescindible para los escritores de novelas y relatos. Incorporar gestos y movimientos de manera intencional puede dar vida a los personajes y hacer que tus historias sean más inmersivas. La próxima vez que escribas, presta atención a cómo los gestos pueden complementar o incluso transformar la narrativa. ¡El cuerpo también cuenta historias!



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23 marzo 2019

Tú eres mi razón de vida

Yo sé que estás ahí,
estás donde yo estoy
siempre junto a mí,
si nada me salía bien
siempre estabas tú,
mis días grises,
se pintaban de color
cuando tú estabas ahí,
me ayudas a continuar
y me hiciste ver
que podía seguir
lograr mi sueño
y creer en mí.

Puede que el tiempo
nos haya separado
pero tú estarás conmigo
aquí en mi corazón.

Se que piensas
que no me acuerdo de ti
que todo ha acabado
entre nosotros, pero no es así
te recuerdo cada día
cuando creo que
mis fuerzas se acaban,
cuando todo a mi alrededor
se desmorona y caigo,
me acuerdo de ti.



Tú eres mi razón de vida
eres la energía, en mi corazón,
tú eres quien me da la fuerza
para conseguir mis metas.

Puede que el tiempo
nos haya separado
pero tú estarás conmigo
aquí en mi corazón.

19 marzo 2019

Leyendas de EEUU - Leyenda de la prisión de Alcatraz



La prisión de Alcatraz (La roca) situada en la bahía de San Francisco, es uno de los lugares abandonados más inquietantes de Estados Unidos. Inició como un fuerte y prisión militar. De 1934 hasta 1963 fue una prisión de máxima seguridad, donde estuvieron recluidos los más terribles delincuentes de Estados Unidos como Al Capone, Robert Franklin Stroud, Jose Sierra, James “Whitey” Bulger y Alvin Karpis.
En sus 29 años de funcionamiento, la penitenciaría alegó ser muy segura y que ningún preso escapó con éxito. Habiendo 36 de ellos participado en 14 intentos, en los cuales siete murieron y dos se ahogaron. La escena más violenta se produjo en 1946, cuando un intento fallido de fuga de seis presos dio lugar a la denominada “Batalla de Alcatraz”, en la cual murieron tres reos y dos guardias. El 11 de junio de 1962, Frank Morris, John y Clarence Anglin fueron los primeros y los últimos en escapar.
En la actualidad es un área recreacional. En la cual guardias y visitantes han reportado encuentros tenebrosos del tipo paranormal. Se dice que en noches brumosas el viejo faro que fue derribado en 1906, aparece y desaparece repentinamente, acompañado de un misterioso silbido y una luz verde que destella.
En los lavaderos del bloque C, donde “el carnicero” fue asesinado emana un denso humo que sofoca a los presentes y desparece a instante.
Se cuenta que en la celda 14-D, un área de castigo conocida como “el agujero” donde los reos permanecían en total oscuridad, un interno gritaba que había alguien con ojos rojos brillantes encerrado con él. Sus gritos fueron ignorados y al siguiente día encontraron al interno muerto con una terrible expresión en su rostro y marcas de dedos en su cuello.
La autopsia reveló que la estrangulación no habría podido ser infligida a sí mismo. Por la misma zona se ha visto caminar al fantasma de un hombre con el traje de prisión caminado.
Robert Franklin Stroud “El Hombre Pájaro” un sádico asesino, fue uno de los prisioneros más famosos de alcatraz, falleció el 21 Noviembre de 1963. Diversos testimonios señalan apariciones fantasmales de este personaje, sentado en la cama de su celda.



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16 marzo 2019

¿La amistad existe?

Espero que sí,
pero yo aún no la he encontrado
la busco si
pero yo, sigo recibiendo palos.

No sé si soy demasiado exigente
No sé si busco lo imposible
lo que si sé es que he dejado
de creer en la amistad.

Al menos, en lo que yo creo
que es la amistad.

Una amistad basada
en la sinceridad
y la confianza.

Yo quiero una amiga
que te defienda
frente a los demás
hasta cuando sepa
que tienen razón.

Para mí la amistad
es un tesoro
que todavía
no he encontrado.

12 marzo 2019

Leyendas Españolas - El Reptiliano de Yesa (Valencia)

En ocasiones hemos escuchado voces y testimonios sobre humanoides de todo tipo y pelaje, incluyendo estos seres del tipo reptil que tanto furor hacen en las redes. Existen casos de lo más complejo a este respecto, pero ninguno como el avistamiento del cazador Mateo Chóver en Yesa, Valencia, en 1968. Cogemos la máquina del tiempo y nos plantamos a las 16,00 horas del sábado 31 de agosto de aquel año. Aquí tenemos a tres cazadores de Liria (Valencia) que rondaban los 50 años de edad, haciendo un descanso para prepararse una “torrá” de carne en las proximidades de un barranco situado a unos 5 km al este de la pequeña localidad montañosa de La Yesa (Valencia). Iban a comer y se les notaba relajados. Pero aquella torrá de carne venía acompañada de una sorpresa. Algo les llamó la atención. Una especie de”flash” en el cielo. Qué era eso.

Segundos después, uno de los cazadores, Mateo Chóver, dejó la escopeta y el zurrón en el suelo y se acercó al borde del barranco para orinar un poco ajeno a la luz, sorprendiéndose al observar, al otro lado del citado barranco por el que discurría un riachuelo y a unos cien o ciento cincuenta metros de distancia, la figura de un ser de tipo humanoide que presentaba unas características increíbles: complexión atlética, cabeza de lagarto (sin casco) con dos ojos rojos, manos como garras (en una de ellas sujetaba un casco transparente con visera blanca) y rabo de estilo gato que llegaba a tocar el suelo. Así como suena.

Estas tres partes visibles del ser aparecían desnudas y eran de color gris; el resto de su cuerpo aparecía cubierto por un mono blanco, que bajaba desde el cuello, cubriendo las muñecas y terminando en unas botas blancas. Adosada a su espalda, se distinguía una mochila metálica o caja rectangular de color “aluminio”, de medio metro de altura, que brillaba rematada por una antena negra.



El ente, ofrecía la impresión de estar “esperando a algo o a alguien”, conforme lo manifestado por Chóver y aunque el testigo no estaba seguro del todo debido a la distancia, creyó que el humanoide sacaba de vez en cuando por la boca una lengua bífida.

El humanoide reptiliano parecía no haberse percatado de la presencia de Mateo, quien, agachado entre unos romeros, se giró y avisó mediante señas a sus compañeros para que se acercaran en silencio. Habría que haber visto sus caras. De esa guisa los tres amigos lo vigilaron durante “unos 3 minutos”, hasta que recibieron un susto tremendo al aparecer instantáneamente sobre el algarrobo, a unos diez metros de la copa, un cilindro de aspecto metálico y color negro “que reflejaba el Sol en sus esquinas”

Le calcularon unos treinta metros de longitud por diez más o menos de grosor. Se hallaba completamente estático, en posición horizontal, paralelo al suelo, en sentido noreste-suroeste. No se escuchó ruido alguno. Ahí sí que tuvieron miedo. ¿Y si les llevaban?

Arrastrándose por el suelo y temiendo por sus vidas ya que nunca antes habían visto cosa parecida (pensaron que seres de otro mundo estaban invadiendo España) , los asustados testigos retrocedieron hasta refugiarse con sus escopetas entre unos zarzales, para pasar desapercibidos, llegando a perder Chóver su gorra de caza por el estrés.

Así se mantuvieron, sudando, durante “un rato largo”, pero cuando llevaban escondidos un par de minutos escucharon, procedente del barranco, “un fuerte ruido como de engranajes o maquinaria en funcionamiento, que paró enseguida“. De nuevo les llamó la atención una especie de “flash” en el cielo. En ello , uno de los cazadores de nombre o apellido Guillém, dijo “Será que se han ido…”, mientras que otro, Rafa Llopis, “temblaba de miedo como un conejo” (sic). Al final salieron con precaución del refugio, comprobando que tanto el ovni como el misterioso humanoide habían desaparecido.

Algo más serenos, bebieron agua de sus cantimploras, atravesaron el barranco y se pusieron a investigar el suelo con las escopetas cargadas hasta los topes alrededor del algarrobo, cuyas ramas y hojas más altas aparecían ahora como “quemadas o tiznadas de carbonilla”. El lugar olía a azufre, elemento que no nos cansamos de ver en la casuística ovni. La tierra estaba reseca y hallaron varias huellas de pisadas uniformes de bota de suela lisa, sin tacón, sin hendiduras, escoriaciones o marca alguna. Estimaron una talla 50 de pie y comparando el hundimiento de ellas con los de sus botines de caza, los testigos calcularon que el individuo que las había dejado debería pesar al menos 150 kilos.

Por contraste con el tamaño del árbol, el humanoide debía medir unos dos metros y veinte centímetros o algo más, pues “casi tocaba con la cabeza las ramas bajas”. Guiados por la intuición se dirigieron después hacia una cueva que sabían que existía en la ladera de un monte cercano, pensando quizás que el humanoide había podido salir de allí, “por si se hubiera dejado algo raro dentro de la cueva”. Y allí fueron. Al llegar advirtieron que era imposible meterse en la caverna por lo tupido de la espinosa maleza que cubría la entrada. Conmocionados, optaron por dejar la “torrá” para otro día, abandonaron la caza de tórtolas y regresaron andando hacia el lugar donde habían estacionado sus motocicletas. Durante el trayecto, se encontraron con una pareja de la Guardia Civil, a quienes informaron de lo ocurrido. Los guardias, que no tomaron nota, tras escucharles respondieron “Por estas tierras eso es normal; los ha visto más gente.

Al llegar a sus casa, los testigos comentaron que habían visto “algo que no era de este mundo” a sus familiares más allegados y amigos íntimos, pero el suceso no trascendió a la opinión pública jamás.


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09 marzo 2019

Hoy por fin, te he perdido

Hoy por fin he comprendido
que no te volveré a ver.

Hoy me he dado cuenta
que te marchas de mi vida.

Hoy he visto el futuro
que me desgarra el alma.

Hoy he temido al destino
que me ha dicho adiós.

Hoy he descubierto
que mi vida va a cambiar

Hoy he sentido el miedo
que cambiará mi deseo.

Hoy por fin he comprendido
que no te volveré a ver.

05 marzo 2019

Leyendas Españolas - Hospital del Tórax (Tarrasa)

Tal vez sepan las leyendas de terror que circulan en torno al famoso y antiguo Hospital del Tórax. Aquí vamos hacer un pequeño recuento, así que pónganse muy cómodos.

En la ciudad española de Tarrasa, en la provincia de Barcelona, había un antiguo hospital que albergó a pacientes con enfermedades respiratorias graves entre los años 1952 a 1997, su nombre era "Hospital del Tórax". Actualmente aquél lugar es el parque Audiovisual de Cataluña.



La historia es interesante. En los años 50, el Ministerio de Sanidad de España, decidió construir un hospital cerca de Barcelona en donde se reclutarían a los enfermos de cáncer de pulmón, fibrosis o tuberculosis que habían en Cataluña. La ciudad elegida fue Tarrasa porque curiosamente posee el bosque de la Pineda que con su aire fresco y puro beneficiaría a los enfermos. El plan se llevó a cabo y finalmente en 1952 se inauguró dicho hospital.

Funcionó normalmente hasta el año de 1997, cuando quedó totalmente abandonado. Según registra la historia fue en la década de los 70 que empezó el declive del mismo, cuando su capacidad se redujo a la mitad. Pero ¿qué es lo que se cuenta de éste misterioso y a la vez terrorífico lugar?. 

Entre aquellas curiosas características se envuelve una oscura leyenda que decía que en el Hospital del Tórax había una actividad paranormal grande (se escuchaban ruidos, voces o gritos entre los solitarios pasillos y habitaciones, especialmente en las plantas 4, 5 y 9 y también en el famoso jardín), pero nunca se pudo comprobar.

Las leyendas asimismo cuentan que cuando investigadores entraban en la capilla o en algunas plantas del hospital, era extrañamente misterioso el que aparatos para medir actividad paranormal no funcionaran o que las baterías de los mismos, se dañasen. 

En el año 2004 la policía autónoma de Cataluña detuvo a un joven que se había sustraído desde las instalaciones del hospital un feto conservado en formol. Esto hizo nacer a la leyenda de que en la planta 5, había un almacén que contenía restos humanos. Nunca se supo el propósito de aquellas muestras (como la del feto) ni el porqué fueron abandonados. Muchos suponen que se hacían experimentos en la lucha contra la tuberculosis.

Leyendas de fantasmas, voces y rituales, qué no se ha dicho de este antiguo Hospital. Pero como suelen decir en una frase "cuando el río suena, es porque piedras trae" no podemos descartar nada de lo que se cuenta. A los amantes de las leyendas y el terror esta historia resultará muy interesante y a otras personas les traerá miedo. Invito a que cada uno saque sus propias conclusiones.

Datos curiosos:

  • Los pacientes que eran reclutados en el Hospital del Tórax, permanecían aislados totalmente del mundo exterior, su único contacto eran unas cabinas telefónicas y la radio.
  • El edificio poseía dos alas principales, nueve pisos de altura y sótanos.
  • Se dice que la compañía Filmax adquirió el 80% del hospital para convertirlo en un parque audiovisual pero se sabe que la Generalidad de Cataluña y el Ayuntamiento de Tarrasa acordaron transformar el recinto en un complejo audiovisual.
  • El Hospital del Tórax poseía 1500 habitaciones divididas entre la clase obrera y la burguesía.
  • Este lugar fue durante muchos años el sitio con índices más altos de suicidio. Se cuenta que los enfermos se arrojaban desde la novena planta hacia el jardín (cuyo nombre era "La Jungla")
  • Un enfermo permanecía en promedio un año recluido antes de morir o suicidarse.
  • La lenta y dolorosa muerte de los enfermos hacía que todos sintiesen una psicosis que atormentaba sus mentes por lo que esto inducía muchísimo al suicidio.
  • Muchos se suicidaban al saber que sus propios familiares querían deshacerse de ellos, abandonándolos en ese lugar. 
  • El Hospital del Tórax ha servido de inspiración para hacer algunas películas de terror.
  • Algunas escenas de películas de terror se han rodado en este antiguo hospital, entre ellas: "Los sin nombre (1999)", "El maquinista (2004)" y "Frágiles (2006)"
  • En el jardín donde muchos acabaron sus vidas, se decía que escuchar voces era habitual. 
  • Había una capilla que según las leyendas, era una zona de rituales satánicos.

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02 marzo 2019

Siento el vacío, que nos mata

Siento el vacío 
que nos separa.

Siento el destino
que nos distancia.

Siento el miedo
que nos rodea.

Siento el deseo
que nos depara.

Siento el dolor
que nos condena.

Siento el pasado
que nos vigila.

Siento el futuro
que nos anhela.

Siento el cambio
que nos mata.